"Tenemos muchos funcionarios y magistrados que tienen un comportamiento indecoroso y reprochable"

Los judiciales de Tierra del Fuego paran hoy en reclamo de mejoras salariales y exigen además mayor infraestructura para atender la actual demanda de Justicia y respuesta a sus denuncias por situaciones de violencia dentro del ámbito laboral y por la discriminación que existe en general dentro del ámbito judicial.

Ayer, en declaraciones a Radio Provincia, Alicia Ponce señaló que “nosotros estamos cerrando el mes ocho con el 35% de aumento, por debajo de la inflación y muy por debajo de lo que ya cerró el gobernador con los diferentes escalafones, que fue de 71%, y lo que cerraron los municipios. Queremos que el Superior firme también un acta acuerdo para los trabajadores, porque la Asociación de Funcionarios y Magistrados tiene su representación y nos queremos desprender de esta cadena invertida que ha sido histórica, donde mandaban a luchar a los trabajadores porque también les tocaba a ellos. Y no es lo mismo un 65% sobre salarios de 1 millón o 2 millones, que es sobre salarios de 140 o 150.000 $”, remarcó la Secretaria General.

“Mañana paramos por una cuestión salarial. Buscamos desprendernos de la lógica de la plata para todos. Queremos que empiecen a firmar para los trabajadores, pero también todos, ante lo ocurrido, tenemos motivos para parar mañana”.

Ponce afirmó que los trabajadores judiciales enfrentan muchas situaciones dentro del ámbito laboral “que tienen que ver con la violencia de género, con la discrecionalidad en la carrera del trabajador y con los antojos de los funcionarios y magistrados cuando los trabajadores no son afines a sus ideas”.

Además recordó que desde el gremio  “hace mucho tiempo que venimos denunciando la violencia dentro de la institución, porque tenemos muchos funcionarios y magistrados que tienen un comportamiento totalmente reprochable e indecoroso hacia los trabajadores”.

En este sentido, se refirió a la denuncia por violencia de género que pesa sobre el relator del STJ Marcelo Guzmán. “Qué mal estaremos que tengo que decir que el apartamiento realizado por el Dr. Loffler a Guzmán, ya es una medida sin precedentes. Porque eso, en otro contexto, no lo han hecho nunca. Pero ya es un precedente. Esta son las cosas a las que ellos se exponen cuando es el poder del estado que más se resiste a los cambios. En la Justicia no hay perspectiva de género. Sino, fíjense en la estructura de cargos de dirección y cargos de jueces, el 90% son hombres. Acá en Rio Grande tenemos una disparidad amplia”.

“La Justicia no se aggiorna y le cuesta mucho entender que no pueden manejarse como patrones de estancia, porque así se manejan”, afirmó la gremialista y lamentó “que se tenga que visibilizar la violencia de algunos actores que tendrían que estar atravesando un Jury y que generalmente se tapan porque el Consejo de la Magistratura es un club de amigos”.

“Yo me hago esta pregunta. Cómo sería una selección de juez si dentro del Consejo de la Magistratura estuviera el colectivo de mujeres y el colectivo de pañuelos amarillos. Cómo sería la selección de jueces si estuviera la representación dela secretaría de los derechos humanos, de las asociaciones intermedias que luchan para tratar de equilibrar estas diferencias”, cuestionó.

“A eso tenemos que apuntar como sociedad. A llevar a la representación de la gente a las personas más empáticas, con perspectiva de género, conociendo la idiosincrasia del lugar donde falla, pero lamentablemente estamos muy pero muy lejos de todo eso”.

“Esto no es por una falta de recursos. Es porque el Poder Judicial, de un tiempo a esta parte, es un actor más del juego político de la provincia. No tiene independencia, no porque no puede, sino porque no quiere”.

Ponce recordó que en 27 años, sólo dos magistrados fueron sacados del Poder Judicial por mala conducta: El Dr. Assan, y el Dr. Velazco en Río Grande. “Eso no es porque tengamos un servicio donde los jueces son todos impolutos, probos, dignos… no. En el club de amigos que es el Consejo de la Magistratura, es más fácil cerrar con determinada estructura política y designar jueces afines para garantizar después cuestiones políticas”.

A pesar de todo, la gremialista aseguró que existe una única esperanza para revertir esta situación y es “tratar de forzar dar vuelta la balanza para garantizar los derechos de nuestros hijos, de nuestra vida y la de todos los ciudadanos. Exigir y visibilizar es lo único que nos toca y en nuestro caso, estamos dispuestos a todo eso”, concluyó.