Completadas las designaciones de todas las autoridades durante la sesión preparatoria de este miércoles, la secretaria Parlamentaria del Pro, Silvana Giudici, pidió la palabra para pedir que se le tomara juramento a Ricardo Garramuño, para completar el mandato del fallecido Héctor Stefani, tal cual había anticipado parlamentario.com.
La legisladora invocó los artículos 48 y 64 de la Constitución nacional y los artículos 3 y 11 del reglamento del Cuerpo, para que el presidente de la Cámara procediera a tomarle juramento, siguiendo la sentencia ejecutoria y 2la doctrina pacífica que se ha establecido en otros años, sobre todo en los casos de mayo 2020, con el caso Larroque, y el reemplazo de agosto 2020, cuando Guillermo Carnaghi asumió en lugar de Darío Martínez. “Estimo que es el momento justo, dado que hemos terminado con la jura de autoridades, que usted le tome juramento al diputado electo Ricardo Garramuño”, señaló Giudici.
Luego, los diputados volvieron al tema de la sucesión del diputado Stefani. El presidente del bloque UCR, Rodrigo de Loredo, expresó la “categórica oposición y reserva” hacia el juramento de Garramuño. “Creemos que la banca le pertenece a Dalila Nora”, explicó, argumentando que la causa está en sede judicial y no está firme. Hubo una resolución de primera instancia que falleció a la dirigente radical, el fiscal de alzada también opinó en el mismo sentido, mientras que la Cámara Nacional Electoral falló favoreciendo a Garramuño, pero con un voto en disidencia. Como Dalila Nora presentó un recurso ante la Corte, De Loredo reclamó esperar antes de tomarle juramento a Garramuño.
Desde Encuentro Federal, Oscar Agost Carreño planteó la posición de su bloque, favorable a la asunción de Garramuño. Recordó la existencia de un fallo judicial que agotó la vía ordinaria, y sostuvo que la Cámara debía resolver el tema y no dejarlo en manos de la justicia. “Falleció un varón, tiene que entrar un varón”, explicó, aclarando que “somos responsables en esta Cámara de cerrar el tema así”. Planteó que la Cámara Nacional Electoral “es la última instancia en temas electorales” y dijo que “no hay un conflicto entre poderes, sino entre privados, y tenemos que interpretarlo en este recinto”.
Una posición inversa fue la que expuso a continuación la radical Carla Carrizo, para quien no se estaba discutiendo “una cuestión de partidos; es una cuestión de derechos. Estamos construyendo la práctica de la equidad en el Congreso nacional. Si se apeló a la Corte, hay un proceso judicial abierto y tenemos que respetarlo”.
Volvió a hablar Giudici, para invitar a todos a revisar los expedientes. “Hay un acta de proclamación de (los diputados) Yutrovic y Stefani, y los demás son todos suplentes. Esa sola acta de proclamación de las listas hace que la persona que tenga que asumir sea Garramuño. Luego la Cámara Electoral entiende lo mismo y determina en el ámbito ordinario, así que se agotó esa instancia”, sostuvo Giudici, aclarando que la jura por parte de Garramuño ya tendría que haberse cumplido en la sesión anterior.
También respaldó la asunción de Garramuño Juan Manuel López, quien aclaró que ante la paridad de género ha quedado claro que en Diputados no se distingue entre suplentes y titulares, cosa que sí ocurre para los reemplazos en el Senado. Y de acuerdo con el reglamento, remarcó que el diploma de Garramuño no tiene impugnaciones, cosa que también obra en favor del fueguino.
A continuación, Fernando Carbajal aclaró que como la decisión de tomarle juramento implica un acto de convalidación del título, “esto requiere que haya quórum”.
Desde el oficialismo, Nicolás Mayoraz dijo que a su juicio “el principio de división de poderes le da a la Cámara el poder resolutorio. “Los avatares de la justicia no cambian la suerte; le toca a esta Cámara decidir cuál es el diputado que tiene que ingresar”, remarcó, considerando que le correspondía a Garramuño, “porque nos ampara la Constitución, porque lo establece el reglamento y porque la reglamentación de la ley es plausible para llegar a este resultado”.
Cerró el debate Giudici, quien recordó el acuerdo alcanzado en Labor Parlamentaria para tomarle juramento, y planteó que en la sesión del 29 de noviembre del 89 se debatió un caso similar. “Es imprescindible que la Cámara tome juramento al diputado Garramuño, que tiene una sentencia ejecutoria, no se otorgó el recurso extraordinario”. Y tras aclarar que no estaban menoscabando la paridad de género, ni la capacidad de la mujer demandante, correspondía que asumiera el varón.
Con todo, reconoció que no había quórum, y se quejó de la ausencia de sus pares, por lo que pidió que se tomaran las asistencias, “porque el impedimento de jura del diputado Garramuño deberán responderlo los que hoy decidieron levantarse de sus bancas. Esta Cámara entra en desobediencia si por segunda vez se le impide la jura al diputado que está presente en el palco de autoridades”.
Como ya no había quórum, Martín Menem dio por caída la sesión, no sin antes cumplir con el minuto de silencio pedido previamente.
Parlamentario.com