La canciller, Diana Mondino, respaldó el acuerdo que trazó con Reino Unido para reanudar los viajes desde la Argentina a las Islas Malvinas al asegurar que “la soberanía está totalmente resguardada”.
Si bien aclaró que no se trata de un entendimiento formal, insistió en que el Gobierno mantiene “la convicción de que las Malvinas son y serán argentinas” por eso apuestan a “poder tener una relación más fluida”.
“Hay una cuestión emotiva, a pesar de los años y hay familiares que no han podido saludar a sus seres queridos. Vamos a hacer un programa de identificación, he hablado con la Cruz Roja en Ginebra, como terceros independientes y especializados”, detalló en declaraciones radiales.
En la misma línea, amplió: “Otra cosa que vamos a hacer es un vuelo de familiares a las islas, es una cuestión completamente humana. La soberanía está totalmente resguardada”.
Respecto a la ausencia del tema en el discurso que pronunció el presidente Javier Milei ante la Asamblea General de la Naciones Unidas (ONU), la canciller aclaró: “El tema que se está tratando en este momento es el terrorismo, el conflicto en Rusia, Ucrania, en Israel y Gaza, la crisis de Venezuela, esos son los temas que le preocupan a la comunidad internacional”.
“Hemos hecho una presentación donde se mantiene el doble apoyo. Hicimos la mención y solicitamos que la Argentina e Inglaterra negocien al respecto”, resaltó además.
Luego de que la funcionaria acordara con su par británico, David Lammy, la reanudación del vuelo semanal desde San Pablo a las Islas Malvinas, que realizaba una escala mensual en Córdoba y había sido discontinuado en 2020, insistió: “Esto no afecta la soberanía. Si las islas son argentinas, cómo un argentino no puede ir a nuestro territorio”.
Para Mondino, los kelpers “son habitantes que tienen ocupado el territorio argentino”, pero remarcó que el paraguas impone evitar discutir sobre la soberanía del territorio, para avanzar “sobre otros temas en los que tenemos que tener una relación activa”.
El discurso de Milei en la ONU
En otro pasaje de la entrevista, la ministra tradujo el discurso del discurso del presidente Javier Milei en la asamblea general de las Naciones Unidas, y señaló que el Gobierno adherirá a “algunas cosas” bajo la premisa de que “ambas agendas (la 2030 y la del Futuro) son de aplicación voluntaria, total o parcialmente”.
“Estamos preocupados porque no puede haber un organismo internacional que le diga a todos los países lo que tienen que hacer, no podemos estar de acuerdo con el sistema generalizado de toma de decisión. Hay mediciones muy asimétricas sobre el cuidado del medio ambiente. ¿Qué es lo que tenemos que hacer los países subdesarrollados? ¿Tenemos que hacer todos lo mismo? ¿Quién dice que somo subdesarrollados? Una medida general para todos puede no tener sentido, es lo que muchos países estamos diciendo”, indicó la canciller.
Por último, hizo eco a su permanencia en la administración libertaria, en medio de los rumores que aseguran su pronta salida. “Estoy para servir a la Argentina, y el Presidente tiene que tomar sus propias decisiones. Cuando él lo considere apropiado, un minuto antes voy a presentar la renuncia sin ningún tipo de problemas. Para mí es un orgullo servir a la Argentina”.