El desborde del Río Ladrillero dejó aislados a los vecinos de Cabo San Pablo, quienes solicitan urgentemente la intervención del Gobierno provincial para restablecer la circulación.
Las intensas lluvias provocaron la crecida del río, levantando una alcantarilla y bloqueando completamente el paso en el kilómetro 40 de la Ruta complementaria A. El lugar se encuentra a 170 kilómetros de Ushuaia.
El sector, que había recibido obras de infraestructura en diciembre pasado, hoy enfrenta una grave situación. Las fuertes precipitaciones también dejan en evidencia la precariedad de estas obras, ya que la obstrucción de las alcantarillas impide el desagüe correcto, generando peligrosas corrientes de agua que imposibilitan el tránsito.
Más de 40 personas se encuentran en una situación crítica, sin posibilidad de cruzar y abastecerse de comestibles y otros suministros esenciales.
Ante este panorama, los residentes de la zona solicitan un pedido de asistencia urgente al gobierno provincial, intervención inmediata para restablecer el acceso y garantizar la seguridad de los lugareños.