El ministro de Educación de la Provincia, Pablo López Silva, junto a su par de Obras y Servicios Públicos, Gabriela Castillo, encabezó este miércoles una recorrida por la finalización de obra en el Jardín N° 7 “Piedra Libre” de la ciudad de Ushuaia, por lo que sus docentes y alumnos podrán retornar a la institución tras el receso escolar de invierno.
“Esta obra es un sueño que teníamos”, resumió el Ministro y recordó que “el problema más grave del edificio era que sus estructuras habían empezado a ceder, y se necesitaba primero de un estudio de ingeniería para determinar lo que realmente estaba pasando, y a partir de esto saber cómo íbamos a intervenir para refaccionar el edificio y ponerlo a punto para que nuevamente esté en funcionamiento”.
López Silva agradeció a la Escuela N° 22 “que nos cedió el espacio y la posibilidad de que nuestros estudiantes puedan tener continuidad” mientras se prolongaban los tiempos de obra, entendiendo que “esta situación ha traído otros problemas también a la comunidad educativa, porque hubo padres que han tenido que llevar a sus hijos a otros jardines y esto fue dificultando el tema de la matrícula del Jardín”.
“La verdad es que ha sido una obra muy importante que tuvo varias etapas, y si bien a nosotros nos hubiese encantado poder entregar la obra en el mes de febrero, con el cambio de gestión a nivel nacional nos dejaron de enviar fondos y la Provincia tuvo que empezar a ocuparse del financiamiento de la obra”, señaló.
En ese sentido, el Ministro indicó que la empresa a cargo de la obra requería una redeterminación de costos y “afortunadamente pudimos llegar a un acuerdo, el Gobernador asumió esa responsabilidad y hoy vemos hecho realidad ese sueño que era la refacción del edificio. Desde el Ministerio vamos a acompañar a la institución para que después del receso invernal vuelvan a su casa”, afirmó.
Por su parte, la maestra mayor de obra e inspectora del Ministerio de Educación, María Inés Valdez, detalló que en el edificio “se hizo un trabajo estructural muy grande porque habían cedido sus fundaciones, por lo que se hicieron fundaciones nuevas, cambio de cubierta de techos, refuerzos estructurales, así como calefacción por aire a nuevo; instalaciones de piso; oficinas administrativas y baños nuevos”.
“En las partes de las aulas se intervino en los pasillos y se construyó un baño accesible nuevo que el edificio no contaba con uno; se pintó y restan los trabajos de exterior, que son el mejoramiento del acceso principal”, detalló.
Por último, la directora de la institución, Cristina Céspedes, expresó su satisfacción “por toda la comunidad educativa que venimos anhelando la culminación de obra”, destacando que “el Jardín está totalmente renovado así que ahora nos queda esperar que los niños y las niñas puedan venir el primer día de clase después del receso de invierno”.
“Van a encontrar un lugar muy acogedor en el que vamos a poder brindarles calidad educativa, así que gracias a los docentes, al equipo interdisciplinario, a las familias por tanta paciencia y ahora vamos a empezar si Dios quiere en nuestro nuevo edificio”, cerró.