Mientras la obra civil continúa, personal de la Secretaría de Desarrollo Productivo y PyME del Ministerio de Producción y Ambiente, junto a profesionales de la Agencia de extensión Rural del INTA y del Instituto de Reproducción Animal de Córdoba (IRAC), comenzaron con la etapa final para ajustar las biotecnologías reproductivas que se brindarán en el futuro Centro y realizar los ajustes necesarios en los equipos adquiridos recientemente.
El doctor Andrés Tribulo del IRAC manifestó que “las actividades en la provincia fueron muy exitosas, dado que junto a profesionales locales que se capacitaron en nuestro Centro pudimos aplicar los conocimientos y obtener productos de alto valor que permitirán mejorar la ganadería fueguina”, a la vez que ponderó el proyecto mencionado que “en esta instancia pudimos utilizar parte de los equipos del Centro lo cuales son de última generación, y permitirán a Tierra del Fuego estar a nivel de los principales centros de Argentina. Desde el IRAC estamos comprometidos con la puesta en funcionamiento del Centro, porque vemos que tanto los productores como el Gobierno provincial lo están impulsando fuertemente”.
La organización de los trabajos tenía previsto actividades en dos establecimientos provinciales, aunque el clima solo permitió los trabajos en Estancia y Cabaña Cabo Peñas, en la cual se obtuvieron pajuelas de los toros “Apuro” y “Bailarín”, quienes fueron Gran Campeón 2017 y 2022 respectivamente en la Exposición, Jura y Remate Hereford de Tierra del Fuego. Durante las dos jornadas de trabajo se pudieron obtener y congelar 598 pajuelas de semen proveniente de estos reproductores de alto mérito genético, las que se utilizarán para la mejora de los rodeos provinciales. Asimismo, se calibraron equipos y pulieron técnicas que se continuarán aplicando por los profesionales locales.
El administrador del establecimiento, Elis Alazard, resaltó la importancia de los trabajos realizados y comentó que “el Centro acelerará tiempos y disminuirá los costos de aplicar estas técnicas en la provincia. Hay que tener en cuenta que resulta muy difícil llegar al nivel de los toros que hoy existen en las cabañas provinciales. Se invierte mucho apostando a la mejora genética, trayendo equipos, profesionales, para lograr animales mejoradores que aumenten la producción de carne y soporten estos ambientes. En particular, con esta actividad hemos podido obtener material genético de un reproductor de muy buenas características que ya estaba al final de su vida útil, por lo que vamos a tener la posibilidad de continuar mejorando nuestro rodeo, algo que no hubiéramos podido realizar sin estas herramientas”.
Desde la Secretaría de Desarrollo Productivo y PyME precisaron que los trabajos realizados hubieran tenido un costo cercano a los 3 millones de pesos para el productor. Sin embargo, a partir de los acuerdos de trabajo con el IRAC y fundamentalmente a raíz de la compra del equipamiento, los costos apenas alcanzaron un 20% de esa suma.
A la vez señalaron que en las próximas semanas se terminará de organizar la agenda de trabajos de la próxima temporada, lo que incluye la extensión del vínculo de asistencia técnica con el IRAC, la continuidad de formación de capacidades locales y el ajuste del equipamiento para que una vez finalizada la obra civil y el proceso de habilitación ante el SENASA, se comience a brindar un servicio de punta que contribuya a mejorar la cadena de ganados y carnes de la provincia.