Este martes, el juez de Instrucción Sergio Pepe, habilitó días y horarios, ante el feriado del 2 de abril, para proceder a tomar indagatoria al conductor del utilitario Renault Kangoo, que circulaba por la calle Facundo Quiroga, presuntamente en exceso de la velocidad permitida y con un nivel de alcoholemia prohibido.
Tras el silencio del imputado, el Juez Pepe resolvió que Alberto Tomás Lamas siga detenido, mientras se aguardan varias medidas de prueba, tales como el resultado de la alcoholemia y un informe solicitado al Juzgado de Faltas de la Municipalidad, para conocer si se encontraba con prohibición de conducir todo tipo de vehículos.
Cabe recordar que el domingo, cerca de las 7:00 horas una Renault Kangoo embistió a una motocicleta marca Honda y quien la guiaba falleció debido a las lesiones sufridas.
Tras averiguaciones policiales realizadas, se pudo saber que momentos antes del siniestro vial con la moto, en la calle Perito Moreno y 17 de Octubre, el mismo rodado Kangoo había chocado contra un taxi y el conductor se había dado a la fuga.
La autopsia realizada a la víctima de este luctuoso incidente vial, reveló que el fallecimiento se produjo por "fractura cervical".
María Laura Sanfelippo, madre de Pablo, reclamo que se haga justicia por la muerte de su hijo.
“Pablo estaba a dos cuadras de su trabajo, terminaba el contrato, pero estaba feliz. Él tenía que estar arriba de un avión y no en la morgue. Quiero que esta persona no vea el cielo, le pueden dar entre 12 y 14 años y no me parece justo”, dijo María Laura en declaraciones a "El Cronista Urbano" que se emite por Radio Provincia.
La desconsolada madre expresó: “Les pido por favor a toda la comunidad de Ushuaia y de Río Grande que nos acompañen en estos días que son durísimos. Porque el juez tiene que dictaminar si esa persona queda libre o presa. Este asesino me lo arrebató, se lo llevó para siempre y no me lo van a devolver nunca más. No voy a estar más con mi hijo, su hija no va a contar más con su papá, su familia y sus amigos tampoco”.
María Laura se esperanzó en que “el juez hará lo que considere justo para que esta persona quede guardada ahí. Quiero que no vea el cielo, pero lamentablemente le pueden dar entre 12 y 14 años y no me parece justo. El tiene 24 años y a los 40 puede salir tranquilamente, pero mi hijo no va a salir nunca más de ese cajón. Ahora está el recuerdo hasta que la justicia dictamine y podamos terminar de hacer la cremación como corresponde”.